'Battlefield 1' nos permite utilizar una amplia serie de armas, además de pilotar también vehículos de todo tipo. Pero, antes de nada, debemos escoger una clase de soldado, una premisa básica en esta serie de juegos desde el primer Battlefield.

El modo 'multiplayer' nos permite elegir una de entre cinco clases normales distintas: asalto (explosivos contra vehículos, armas cuerpo a cuerpo), apoyo (armas de medio y largo alcance, gran cantidad de munición), explorador (francotirador), piloto (o piloto de tanque) y médico; junto a tres más de élite: lanzallamas, centinela (armadura y ametralladora), y cazador de tanques.

Empezamos, pues, con las mejores armas.

La dilatada historia de este rifle británico se extiende desde finales del siglo XIX hasta la invasión norteamericana de Afganistán en 2001 (si, habéis leído bien). No lo recomendaríamos en nuestra lista si no fuera realmente temible, y su larga historia operativa demuestra su efectividad tanto a corta como a media distancia.

El rifle 'yanqui' por excelencia, un nombre que se hizo mítico en el salvaje oeste en el cambio de siglo, pero que también equipó a las fuerzas expedicionarias norteamericanas en Europa a partir de su desembarco en 1917.

Con cargadores de 20 balas más 1 en la recámara, duplica la capacidad de sus rivales y sus aliados, teniendo una reserva de 105 balas más y una ratio de disparo de 299.

La abuela de la MP40 que se haría icónica de la Wehrmacht en la 2GM fue el primer subfusil ametrallador del mundo, producto del genio militar alemán de la época, y nacido para equipar a una nueva clase de soldados, los grupos de asalto 'sturmtruppen', las 'tropas de la tormenta'.

Si el nombre os suena a Guerra de las Galaxias, no os extrañéis, pues los Stormtroopers tomaron a estos temibles soldados de 1918 como inspiración.

La MP18 utiliza cargadores de 32 balas, superando a otras armas similares en capacidad, e intimidando todavía más. Ligera, práctica… ser los primeros tiene sus ventajas.

¿Cómo clasificamos este rifle automático norteamericano? Demasiado pesado como para utilizarlo de forma totalmente eficaz a la carrera, no nos ofrece tanta potencia como otras ametralladoras de mayor tamaño, y no les gana en igualdad de condiciones, pero si consta en nuestra lista, por algo será.

Hotchkiss es sinónimo de ametralladoras y de muerte segura. Este desarrollo galo provocará el pavor entre tus enemigos germanos gracias a su cargador de 30 balas, con una reserva de 150 y una ratio de disparo de 450.

Es una ametralladora ligera aunque voluminosa, por lo que podremos llevarla con nosotros aunque lo más recomendable es dispararla cuando nos echemos al suelo. Es ideal para ofrecer fuego de cobertura en el caso de ataque de nuestros compañeros, o, una vez estratégicamente situados con ella, repeler un ataque de la infantería enemiga.

El primer rifle antitanque de la historia, un tipo de arma que florecería en el periodo de entreguerras pero que llegaría a su ocaso en la Segunda Guerra Mundial debido al mayor blindaje de los tanques, cada vez más grandes y pesados. No obstante, en la época -y en 'Battlefield 1', por extensión-, el blindaje de estos monstruos todavía era suficientemente delgado como para hacer mella con las gruesas balas de este rifle.

Además, para maximizar el daño que le hacemos al tanque, podremos apuntar contra un elemento concreto del vehículo. ¿Mi recomendación? Apuntad a las orugas y lo inmovilizaréis. Entonces ya podréis hacer con él lo que queráis, como meterle explosivos o acribillar a la tripulación a medida que sale de él.

¿Un lanzacohetes en la Primera Guerra Mundial? No, pero su predecesor utiliza principios y mecánicas similares. Fue utilizado por los británicos.

Muy útil para batir nidos de ametralladoras o trincheras fortificadas, estos lanzadores son utilizados desde un emplazamiento estable mediante un bípode, por lo que ni soñemos con emplearlo a la carrera mientras nos lanzamos al ataque, aunque nos será válido para lanzar un primer y mortífero golpe con el cual diezmar las defensas enemigas, o cubrir a nuestros compañeros.

También nos permitirá montar defensas fijas sobre el terreno contra vehículos e, incluso, aviones y dirigibles.

Pero, cuidado, porque además de la consabida debilidad a las balas que le den en el depósito de combustible, nuestro lanzallamas no será efectivo a la primera: empezará lanzando un chorro de combustible sin encender, para quemarlo al cabo de unos segundos.